En la Escuela Primaria Presidente Adolfo López Mateos, ubicada en el municipio de Manlio Fabio Altamirano, Ver., ha sido posible identificar que el desempeño escolar de algunos alumnos es bajo debido a la escaza o nula participación de los padres de familia en la educación formal e informal de los estudiantes.
La mayoría de los padres de familia de la escuela primaria, no muestran interés por atender los asuntos relacionados con la educación de sus hijos y como consecuencia, el desempeño escolar, que incluye los conocimientos, las habilidades y las actitudes y valores de los alumnos, así como la calificación numérica de las evaluaciones escritas y las tareas de clase y extraclase, es bajo.
La responsabilidad de la educación es compartida, es decir, debe existir participación por parte de los dos actores principales en el proceso de enseñanza aprendizaje, el docente y el alumno. Sin embargo, a dicha responsabilidad se agrega un actor más que resulta importante para continuar guiando al estudiante fuera de la escuela, el padre de familia.
Tanto en investigaciones nacionales como internacionales de Dearing, Kreider y Weiss (2006), Sanders (2005), Driessen, Smit y Sleegers (2007) y Ruiz de Miguel (2009), citados por Colás y Contreras (2013), muestran la conexión entre participación familiar y rendimiento escolar, señalándose como un factor clave en el éxito académico. Estos estudios comprueban que el compromiso, tanto de profesores como de los padres, favorece los logros de los alumnos.
Los invito a observar el video que se muestra a continuación para reflexionar acerca de la importancia que tiene que los padres de familia dediquen tiempo a sus hijos en casa y en la escuela.
La mayoría de los padres de familia de la escuela primaria, no muestran interés por atender los asuntos relacionados con la educación de sus hijos y como consecuencia, el desempeño escolar, que incluye los conocimientos, las habilidades y las actitudes y valores de los alumnos, así como la calificación numérica de las evaluaciones escritas y las tareas de clase y extraclase, es bajo.
La responsabilidad de la educación es compartida, es decir, debe existir participación por parte de los dos actores principales en el proceso de enseñanza aprendizaje, el docente y el alumno. Sin embargo, a dicha responsabilidad se agrega un actor más que resulta importante para continuar guiando al estudiante fuera de la escuela, el padre de familia.
Tanto en investigaciones nacionales como internacionales de Dearing, Kreider y Weiss (2006), Sanders (2005), Driessen, Smit y Sleegers (2007) y Ruiz de Miguel (2009), citados por Colás y Contreras (2013), muestran la conexión entre participación familiar y rendimiento escolar, señalándose como un factor clave en el éxito académico. Estos estudios comprueban que el compromiso, tanto de profesores como de los padres, favorece los logros de los alumnos.
Los invito a observar el video que se muestra a continuación para reflexionar acerca de la importancia que tiene que los padres de familia dediquen tiempo a sus hijos en casa y en la escuela.
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